MAñANA

Lo imposible a la ley en cuanto era débil por la carne, lo hizo Dios, enviando a su propio Hijo en semejanza de carne de pecado y por el pecado, condenó al pecado en la carne. --- Y que de todo aquello de que en la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en Éste todo creyente es justificado. --- Porque la ley, teniendo una sombra de los bienes venideros, no la imagen misma de las cosas, nunca puede con los mismos sacrificios que ellos ofrecen continuamente cada año, hacer perfectos a los que se acercan. De otra manera, ¿no habrían cesado de ser ofrecidos, ya que los que tributan el culto, habiendo sido una vez purificados, no tendrían ya más conciencia de pecados? --- Así que, por cuanto los hijos participaron de sangre y carne, Él también de la misma manera tomó parte en ellas, para que, por medio de la muerte, destruyese a aquel que tiene el imperio de la muerte, esto es, al diablo, y librar a todos los que por el temor de la muerte estaban sujetos a esclavitud durante toda la vida. Porque ciertamente no echa mano de los ángeles, sino que echa mano de la simiente de Abraham. Por lo cual debía ser en todo semejante a sus hermanos...

 

 

Romanos 8,3 --- Hebreos 10,1-2 --- Hechos 13,39 --- Hebreos 2,14-17 

NOCHE

Porque no hay diferencia, pues todos han pecado y no alcanzan la gloria de Dios. - No hay justo, ni aun uno. - No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. - Pues no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque. - ¿Cómo será limpio un nacido de mujer? - Temamos por tanto nosotros, no sea que permaneciendo aún una promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca quedarse atrás. - Yo conozco mis transgresiones, y mi pecado está siempre delante de mí. - He aquí, yo nací en iniquidad, y en pecado me concibió mi madre. - También Jehová ha quitado tu pecado, no morirás. - A los que justificó, a éstos también glorificó. - Pero nosotros todos, con rostro descubierto, la gloria de Señor mirando, estamos siendo transformados en la misma imagen de gloria en gloria, como por el Señor, el Espíritu. - Si en verdad permanecéis fundados y firmes en la fe, y no os dejáis mover de la esperanza del evangelio... - ...que anduvieseis como es digno de Dios, que os llama a su propio reino y gloria.

 

 

Romanos 3,23 - Romanos 3,10 - Romanos 3,12 - Eclesiastés 7,20 - Job 25,4 - Hebreos 4,1 - Salmos 51,5 - Salmos 51,7 - 2 Samuel 12,13 - Romanos 8,30 - 2 Corintios 3,18 - Colosenses 1,23 - 1 Tesalonicenses 2,12